martes, 30 de diciembre de 2008

"Tres Sombras" de Cyril Pedrosa

Cuando un libro apenas necesita palabras para expresar emociones, o sus ilustraciones son capaces, por ellas mismas, de despertar emociones, en estos casos, que desgraciadamente no son tan comunes como nos gustaría, estamos frente a verdaderas obras de arte.  
En mi continua búsqueda de nuevos textos he descubierto Tres Sombras (Trois Ombres) del francés Cyril Pedrosa. (Sigo haciendo caso a aquellos amigos que me permiten adentrarme en aquella literatura que me es más ajena, lo que es de agradecer). Esta maravillosa fábula ha conseguido conmoverme utilizando un lenguaje breve, casi simbólico, mientras el peso de la trama lo constituye un magnífico grafismo, en ocasiones elegante y preciso y que es capaz, por momentos, de alcanzar cotas que rozan el expresionismo más absoluto.  
Tres Sombras es una historia de vida y esperanza. Una historia de amor paterno-filial en la que los personajes principales, Louis y su pequeño Joachim, se embarcan en un largo viaje escapando de tres sombras que, misteriosamente, han aparecido en el horizonte de su modesta existencia. Esta huida hacia adelante, hacia la esperanza, los lleva a adentrase en lugares misteriosos y lejanos, hasta que descubren que es imposible escapar de lo inevitable. Una historia basada en la experiencia de un amigo de Pedrosa que perdió a su hijo de pocos años.
Tres Sombras es su segunda novela, con la que logró ser reconocido como comic esencial en el Festival Internacional  del Comic de Angolulême 2008. Este autor francés que procede del mundo de la animación, pasado más que evidente en la expresividad con la que dota a los personajes, juega con el lector al que maneja como si estuviera tras una cámara y nos encontráramos sentados frente a una pantalla. Es ejemplar el uso que hace de las secuencias en perspectiva, así como del juego de luces y sombras con la que salpica sus viñetas. Una novela en la que se hace casi innecesaria la existencia de diálogos, ya que las ilustraciones son lo suficientemente expresivas y detalladas, como para que la historia nos conmueva sin necesidad de palabras.

jueves, 18 de diciembre de 2008

Encuentro Poético "Hijos de la Medianoche"

Hay noches en las que se hace difícil salir de casa. El sofá, una manta y un buen libro ejercen una atracción realmente poderosa. Sólo aquellos aventureros que navegan a contracorriente son capaces de sobreponerse a las adversidades y salir en busca de una recompensa que a muchos pasaría inadvertida. 
El pasado sábado 13 fue uno de esos días. El frío gélido, nada corriente por estas latitudes, era un enemigo demasiado convincente, casi invencible. Quizá Horacio hubiese imaginado una playa semidesierta en algún rincón del caribe, pero, el resto de los mortales, aquellos que no nacimos de la pluma de Cortazar, debimos pertrecharnos con la poca ropa de invierno que resiste en nuestros armarios y salir de casa dejando al aire el menor resquicio posible de carne. Los hijos de la medianoche nos esperaban para un encuentro poético que, a decir verdad, es tan extraordinario en San Fernando como el nacimiento de los seres que daban nombre al evento.
Sobre las ocho de la noche, y batallando contra el espíritu festivo de aquellos compañeros de oficina que únicamente parecen agradables en las contadas ocasiones que los obligan el calendario, comenzó el encuentro. 
Ana Pérez Cañamares fue la encargada de rebuscar, entre copas y felicitaciones, un poco de cordura y silencio. Ana Pérez nos llevó a su trinchera, a la alambrada de su boca, a su vida y a su piso de treinta y siete metros cuadrados. Nos presentó a su hija y a sus padres. Todos descubrimos su mundo y cómo la poesía tiene voz y aspecto de mujer. 
Eduardo Almiñana consiguió que nos pegáramos a la pared. Cargó, apuntó y disparó. Disparó repetidamente y sin que se le encasquillara la palabra, contra todo y contra todos, porque sus versos son balas. Impactantes y demoledoras. Eduardo es un buen tirador y tiene motivos más que suficientes para ser Robert Crumb, pero ¿realmente lo necesita?.
Salvador Reyes fue el contrapunto de Eduardo. Subieron juntos al escenario y se agradeció. Salvador puso la venda a tanta herida. Pasó páginas a sus calendarios anónimos y navegamos de agosto a diciembre en el tiempo del verso. Nos reconfortó con sutileza y estilo, a la espera de que sigan pasando los años y Salvador los siga escribiendo. 
Rosario Pérez Cabaña fue el último poeta en subir al escenario antes del fin de fiesta. Rosario es… Rosario. Es poesía. Es la belleza. Es la elegancia en la palabra. Es la poeta que escribe y recita con la misma magia una y otra vez. Nadie puede cansarse de ver y oir su poemas. Mientras todos observamos ella canta, canta y nos encanta. 
Al final, Ariel Cubillas nos cantó sus versos. Nos bañó de sones cubanos y nos refrescó para que pudiéramos salir limpios de esa noche. Jugamos todos a las adivinanzas como si estuviéramos solos. Fue el fin de fiesta perfecto a una noche perfecta. Hasta se atrevió a invitar a Rosario al escenario para acabar con la conga triste más feliz del mundo. 
Después de cincuenta años, los hijos de la medianoche reaparecieron en San Fernando, y yo estuve allí. Gracias a todos.

domingo, 30 de noviembre de 2008

"Tigre Blanco" de Aravind Adiga

Otro autor indio, y afortunadamente el número sigue creciendo, irrumpe en la escena literaria mundial con una nueva joya, Tigre Blanco (The White Tiger).
Dos son las corrientes narrativas en las que claramente se pueden encuadrar a todos aquellos autores que provienen de la antigua colonia británica. Por un lado escritores como Salman Rushdie o Arundhati Roy, se afanan en presentar una India mágica y religiosa, llena de fábulas y acontecimientos maravillosos, dejando a un lado los problemas más que evidentes que inundan las malolientes calles de ciudades como Delhi o Bombay. Pasan de puntillas sobre la miseria omnipresente de la sociedad india y se centran en los aspectos más glamurosos y espirituales de la milenaria tradición hindi. Justo frente a estos escritores, autores como Vikram Seth o V.S. Naipul se caracterizan por ser mucho menos imaginativos, más austeros, más realistas. Su visión de India es una visión evidente, alejada del misticismo y suntuosidades, en las que los problemas sociales y económicos apenas dejan espacio para la imaginación. Si bien es cierto que siempre, y esto es inevitable, hay toques maravillosos en sus textos, la trama central de sus escritos no se aleja mucho de lo que debe ser la realidad de un pueblo esclavo de sus tradiciones y desamparado ante los graves problemas políticos y religiosos que lo azotan.
Pues bien, Aravind Adiga está claramente encuadrado dentro de estos últimos escritores. Tigre Blanco es una genialidad. Un libro que nos cuenta la historia de Balram Halwai, apodado Tigre Blanco, hijo de un conductor de rickshaw y habitante de una de las zonas más pobres de la India. Una novela epistolar en la que a modo de confesión del reo, Tigre Blanco cuenta como una persona puede cambiar radicalmente su destino. Como un indio nacido en una familia humilde, miembro de una casta de pasteleros, puede ascender desde la más absoluta de las miserias y colarse entre la élite empresarial de la ciudad de Bangalore. Una historia cuando menos inolvidable en la que el lector inevitablemente va acumulando una empatía hacia la figura del Tigre Blanco que se resuelve en comprensión y amor al personaje.
Adiga ha conseguido escribir una novela ejemplar, sarcástica, llena de humor y de momentos melancólicos, una novela más que merecedora del Broker Price 2008. Estamos ante uno de esos libros merecedores de convertirse en eso que la prensa y los críticos se obcecan en denominar “fenómeno literario”, ya que mucho más que otros, rebosa calidad en cada una de sus páginas.
No me resisto a destacar, y espero que no sea por última vez, la magnífica edición en español de esta novela. Miscelánea editores ha trabajado el texto y eso se nota y es de agradecer por aquellos lectores, entre los que incluyo, que aman y disfrutan un libro como un preciado objeto en el que la envoltura desempeña un papel determinante. Desde la cubierta a la textura de las páginas la edición es todo un acierto. Si las MacEditoriales cuidaran los libros y se preocuparan por ellos…

martes, 25 de noviembre de 2008

"El Canalla Sentimental" de Jaime Bayly

Hay determinados autores que en ocasiones son vilipendiados por las críticas, a menudo sin fundamento alguno, debido a su volumen de ventas o al hecho de que no sean lo suficientemente puristas o exquisitos en su estilo de escritura. 
Irreverente, sarcástico, provocador, polémico tanto en su vida privada como en sus múltiples facetas públicas (se define como periodista antes que como escritor y ejerce de presentador en un programa de entrevistas en la televisión americana), Bayly es un auténtico canalla y uno de esos escritores presa de su personaje, que son enjuiciados más como proyecciones públicas que como narradores. 
A este autor peruano no le ha sido suficiente con ganar el premio Herralde y ser finalista del Planeta (esto último lo dejo ahí, tampoco quiero hacer sangre sobre ello), sigue siendo considerado un showman antes que un escritor con algunos libros bastante interesantes. 
Con El Canalla Sentimental nos acercamos algo más a la figura de Jaime Bayly y al peculiar mundo que lo rodea. Después de que nos dejara navegar por su infancia en su Perú natal con Yo Amo A Mi Mami, Bayly continua salpicando sus novelas con datos autobiográficos, si bien es cierto que en esta ocasión en ese título es mucho más explícito pues se trata de un compendio de relatos, que en su mayoría han sido publicado en diversos medios hispanoamericanos, en los que nos narra su relación con el mundo. 
Crea un alter ego, Jaime Baylys, en honor a todos aquellos que se obstinan en atribuirle la patente de una famosa marca de crema de whisky, y de la mano de este, conocemos la relación que mantiene con su novio argentino, la persona que más quiere en el mundo, con su ex mujer, la persona que más quiere en el mundo, (esta dualidad de sentimientos unida a una bisexualidad de la que hace gala casi en cada frase del libro le crea no pocos problemas) con sus hijas, con su familia y con su ex suegra (a la que le dedica multitud de páginas debido a una enemistad que dura años). 
Nos da a conocer a un Bayly sarcástico, frívolo, romántico, un escritor que vive continuamente entre Perú, Argentina y Estados Unidos, con innumerables fobias, como el frío, los ruidos y algunas personas, y con una vida laboral de la que es esclavo pero de la que sin embargo quiere escapar intentando ganar el suficiente dinero para conseguirlo (y quien no).
Un canalla con todas las letras pero un tipo de lo más interesante. Una novela atrayente y embaucadora. Uno de esos libros que, como el diario de otra persona, no puedes o no quieres dejar de leer. Grandes momentos de humor salpican todo el texto que está escrito sin pretensiones. Un libro en el que podemos conocer algo más de Jaime Bayly tal y como es Jaime Bayly.  

domingo, 16 de noviembre de 2008

"Nombrar A Los Muertos" de Ian Rankin

La saga iniciada por Rankin hace veinte años con la publicación de Knots & Crosses, allá por el año 1987 y la aparición en el mundo de las letras de su personaje fetiche, el Inspector Rebus, debe ser  parada obligatoria para todos aquellos amantes de la novela negra y las historias de detectives. 
Nombrar A Los Muertos (The Naming Of The Dead) es uno de las últimos títulos en los que podremos seguir las peculiares investigaciones del Inspector Rebus, ya que recientemente Ian Rankin ha decidido jubilar, después de diecisiete entregas, al correoso Rebus con la publicación de Exit Music, la novela que pone punto final a las aventuras del Inspector escocés.
La aparición de un asesino en serie en Escocia que coinciden con la muerte de un miembro del parlamento que cae desde las murallas del Castillo de Edimburgo, durante una cena de gala, desencadenan una tortuosa investigación llevada a cabo por el incombustible John Rebus cuando todos los ojos se dirigen a Edimburgo, ya que durante esos días se reúnen en la capital escocesa los principales dirigentes mundiales en la reunión del G8. Manifestaciones antiglobalización, conciertos contra la pobreza, incidentes de todo tipo protagonizados por manifestantes venidos de todos los rincones del mundo y por los propios habitantes de Edimburgo que aprovechan la ocasión para mostrar su desacuerdo con los actos programados en Escocia son el aderezo con el que Rankin cocina una historia de suspense digna de los mejores títulos del género.
Ian Rankin es un superventas, no sólo en Reino Unido, sino a nivel mundial, ya que sus novelas se traducen a más de veinte idioma, lo que demuestra que no es un hecho circunstancial, pese a que todas sus tramas son decididamente localistas. Edimburgo, ciudad en la que estudió letras y donde reside desde hace años, es la localización donde se desenvuelve el Inspector John Rebus y desde donde se han exportados sus historias desde hace dos décadas y donde culminará en la próxima entrega en la que Rankin definitivamente jubila al personaje que con el que ha compartido tantas aventuras. 
Rankin ha conseguido revisar la novela policíaca y de detectives, donde son evidentes las influencias que Sir Conan Doyle y Sherlock Holmes han ejercido en su obra.  Con una escritura en la que destaca una elaborada trama y unos diálogos perspicaces, las novelas de Rankin son libros que cuestan dejar de leer, decididamente adictivos. 
Ganador del premio Gold Dagger con su novela Black &Blue y del Edgar con Resurrección ha sido investido como Oficial de la Orden del Imperio Británico por sus servicios a la literatura.

viernes, 31 de octubre de 2008

"Mientras Tú Cantas" de Rosario Pérez Cabaña

Hoy hace un año, aproximadamente a esta misma hora, reposaban sobre mis dedos las palabras impresas, y aún calientes, de Rosario Pérez Cabaña. Un largo año que, sin embargo se ha hecho demasiado corto. Un año en el que me he visto abrazado por las palabras como manos de Rosario. Y por supuesto, un año abrazado por una amistad, de la que tan orgulloso me siento. Quiero compartir, por tanto, el positivismo y la felicidad que me embargan cuando me dejo acariciar por los versos de Rosario y de su magnífico Mientras Tú Cantas. Sentimientos que sólo pueden verse superados por la experiencia de oír personalmente el recitar pausado y preciosista que Rosario hace de su obra. (Recomiendo encarecidamente para aquellos que no tengan la oportunidad de asistir en persona a alguno de sus recitales una pequeña búsqueda en YouTube).  Sirva, por tanto, este comentario como humilde homenaje al maravilloso poemario que tan buenos momentos me ha proporcionado. Egoístamente, para que esos momentos se repitan para siempre. 

“Brevísima descripción de un mundo”

De ti es todo cierto,

sobre todo que miras con los ojos

y que tus ojos existen.

Es cierto, sí, que desnudas caracolas

que cuando entra en ti la flama

que los demás repudian (porque es verdad

que esta ciudad se pega, no vamos a negarlo),

tú sudas. Y ya está.

De nuevo eres tú en las cosas,

dentro,

“en” como si fuera el gerundio del verbo atravesar

que quede claro.

Nadie podrá, jamás, dudar

que de ti es todo cierto, el lunar,

la imberbe cercanía de tus sueños cercenados,

el fluido nasal y la soberbia,

esa forma de no decir la verdad

como lo haría un notario o un miedoso.

Tú no. Tú dices las cosas tal como son de inciertas.

Así, como si nada. Como si fumaras un cigarrillo

sin darte cuenta, por ejemplo.

 

domingo, 19 de octubre de 2008

"Biografía del Hambre" de Amélie Nothomb

Como declama Amélie Nothomb al comienzo del libro “El hambre soy yo”. El Hambre es Amélie Nothomb. Esta enigmática e interesantísima escritora belga nacida en el lejano oriente (su padre era cónsul belga en Japón en el momento de su nacimiento) está hambrienta y nos lo hace saber en su Biografía del Hambre (Biographie de la Faim). Hambrienta en el sentido más amplio de la palabra. Hambrienta de todo lo que le rodea. De la comida, de los lugares donde creció, de las personas que la rodearon, de las que la influyeron, de vida, de relaciones y sobre todo, está hambrienta de palabras.
En Biografía del Hambre conocemos algo más de la mejor escritora menor de 40 años para los 35 críticos con los que cuenta el rotativo Le Figaro (entiéndase que esta encuesta se realizó hace algunos años, ya que si nació en 1967… en fin, las cuentas no salen, pero ahí queda). Conocemos su infancia en Japón y su amor por este país, lo que le llevó a trabajar de traductora en una empresa nipona nada más culminar sus estudios de filología. Conocemos su apetito, literalmente, y como este le llevó a inexplicablemente a un desorden alimenticio que derivó en anorexia. Conocemos la influencia que el alcohol ha tenido en su vida desde muy temprana edad, ya que desde pequeña se hacía con los sobrantes de las copas en las numerosas fiestas que organizaban sus padres. Incluso su obsesión por el agua. Pero sobre todo, conocemos de Amélie su dificultad de adaptación a sus nuevos ambientes. En momentos al ser la única no nipona en la yôchien en la que estudiaba o bien al ser la única belga en el instituto francés de Nueva York donde la matricularon sus padres. Esta inadaptación, que tuvo quizá su punto álgido todo cuando tuvieron que mudarse a Bangladesh, la llevó a descubrir su apetito por las palabras primero y, como consecuencia de ello, por la escritura.
Biografía del Hambre es el conmovedor e inquietante libro autobiográfico de una de las escritoras francófonas más leídas del momento. No es de extrañar que incluso ganara un premio otorgado en internet por los lectores internautas con su novela Estupor y Temblores . Nothomb escribe libros como he leído en alguna entrevista “(…) desde los 17 años y para no suicidarme (…)” y eso se nota. Escribe alrededor de tres manuscritos al año de los que únicamente publica uno dejando los otros dos para ella, sin intención alguna de que vean la luz ni después de su muerte, según ha afirmado en algún momento.
Su escritura refleja esa necesidad que tiene por contar cosas. Cuenta historias casi siempre salpicadas por algún dato autobiográfico, que los hace aún más personales. Sus libros son eso, sus historias. Libros fáciles de leer, entretenidos, aparentemente sin pretensiones, sin complicaciones. Libros que apetece leer de vez en cuando y que te fluyen entre los dedos. A mi personalmente me gustan mucho y hasta el momento no me han decepcionado. Siempre descubro algo interesante en cada uno de sus libros, reflexiones que sobre multitud de aspectos de la vida que la propia autora se hace y que sabe trasmitir magistralmente.

domingo, 5 de octubre de 2008

"Por Amor Al Pueblo" de James Meek

La lectura de Por Amor Al Pueblo (The People’s Art Of Love) es comparable con la emoción de jugar con una matrioska, esas famosas muñecas rusas que son huecas en su interior y albergan una nueva muñeca distinta a aquella que le sirve de soporte.
Expectación y sorpresa son algunas de las cualidades inherentes a esta novela, la tercera del escritor y periodista británico James Meek. El lector se encuentra embargado en una espiral de sensaciones, que al comienzo de la lectura se traducen sobre todo en desconcierto y curiosidad, hasta que salvamos ese pequeño proceso de adaptación que requieren ciertos libros y profundizamos lo suficiente en la trama de la narración, momento en el cual solo nos queda disfrutar de la genialidad de la misma.
No deja de sorprender el hecho de que esta novela, que se encuentra ambientada en un pueblo de la tundra siberiana en los meses posteriores a la revolución de octubre, haya sido escrita por un novelista británico. Cierto es que James Meek trabajó durante casi una década como corresponsal de The Guardian en la extinta Unión Soviética, sin embargo, la perfecta localización de la historia, la profundidad de sus personajes y la exactitud de los hechos descritos a lo largo del libro nos traen a la memoria, personalmente a mi me ha ocurrido, textos de autores rusos contemporáneos de la grandeza de Liudmila Ulítskaya. Quizá alguien pueda pensar que Por Amor Al Pueblo se encuentra más cercano a títulos que narran la historia rusa contemporánea desde el punto de vista de autores no rusos a modo de ensayo o novela histórica, como el genial libro de Jorge Volpi No Será La Tierra. No obstante, para mi no ha sido en absoluto el caso.
Por Amor Al Pueblo es un libro que, tomando como excusa la Revolución Rusa y la estancia de legionarios checoslovacos en el pueblo de Yacik, aborda las nefastas consecuencias que conllevan el fanatismo religioso y político. La convivencia de militares, parroquianos e integrantes de una secta de eunucos residentes en ese pequeño pueblo situado cerca del ártico se ve alterada por la intrusión de Kiril Ivánovich Samarin, cuya desconcertante historia unida al irremediable avance del ejército bolchevique en pos del pueblo, alterará notablemente la vida de la comunidad. Un entramado de situaciones que va tejiendo poco a poco una historia, aderezada con más que evidentes toques mágicos, donde el hambre y la desesperación dejan poco lugar a los sentimientos.
Por Amor Al Pueblo ha encontrado el apoyo de la crítica y de escritores de la talla de Philip Pullman, Irving Welsh o el propio Jorge Volpi. Un libro que fue galardonado con el premio Ondaatje en el año 2006 y que pronto será llevado a la gran pantalla gracias a una adaptación que del mismo está realizando el incombustible Johnny Depp.

domingo, 28 de septiembre de 2008

"Un Hombre En La Oscuridad" de Paul Auster

Al segundo intento me he reconciliado con Paul Auster. Tras una pequeña decepción con Brooklin Follies, me decidí a abordar Un Hombre En La Oscuridad (Man In The Dark) sin prejuicios ni opiniones preconcebidas, olvidando el sabor agridulce que me dejó el primer acercamiento a su obra. Y afortunadamente me alegro de esta decisión. He hallado en Un Hombre En La Oscuridad todo aquello que esperaba encontrar en un libro escrito por este estadounidense universal.
Casi en la misma proporción pueden contarse tanto sus seguidores como sus detractores. Auster es un escritor que a nadie deja indiferente y por ese motivo, por la sensación de indiferencia que me embargó al acabar la lectura de Brooklin Follies, me decidí a leer Un Hombre En La Oscuridad.
En su último libro Paul Auster se afana en jugar con el lector. Nos presenta, por un lado la figura de August Brill, un hombre de edad avanzada, que pasa sus noches de insomnio inventando historias en la oscuridad de su dormitorio y por otro lado, la historia que éste cuenta y que es la de Owen Brick, un joven mago que se despierta dentro de un pozo del que no puede salir. Estas dos vidas que no dejan de ser historias paralelas están predestinadas a confundirse de la mano de Auster. Conocemos la vida de Brill que habita en lo que consideramos como “mundo real” donde el anciano narrador nos presenta a su familia y los accidentes y circunstancias de todos los habitantes de la casa en la que se encuentra. Al mismo tiempo que conocemos la vida de August Brill, gracias a la imaginación de éste, descubrimos la de Brick en un “mundo paralelo”(es difícil no pensar en 1984 o Un Mundo Feliz) en el que Estados Unidos está sumido en una segunda guerra civil y donde no han tenido lugar los grandes desastres que han azotado a los estadounidenses como la guerra de Irak o el atentado del 11 de septiembre.
Paul Auster no sólo crea historias, sino que recrea dentro de la cotidianidad que nos rodea relaciones complejas protagonizadas por personajes humanos y sobradamente trabajados. Aunque se hace difícil distinguir lo puramente ficticio de los guiños biográficos que bañan sus textos (de todos es conocido su afán por aparecer en sus libros en la figura de alguno de los personajes aunque nunca se reserva ningún protagonista). Su prosa es clara, actual y llena de matices. Nadie puede dudar de la calidad de su técnica literaria y creo que Un Hombre En La Oscuridad es un claro ejemplo de todo esto.
Con la lectura de esta novela, me sumo a esa legión de seguidores que considera a Paul Auster un intelectual de los que quedan pocos. Poeta, novelista, ensayista, autor de teatro, guionista de cine, director y, en alguna ocasión esporádica, incluso actor. Muchas son las facetas de Auster y en muchas destaca. En pocas ocasiones ha sido tan certera la concesión del premio Príncipe de Asturias de las Letras como lo fue en la edición del 2006 cuando recayó en la figura de este polifacético escritor.

domingo, 21 de septiembre de 2008

"Kafka En La Orilla" de Haruki Murakami

Y al fin Murakami lo ha conseguido. Después de varios más que meritorios intentos ha logrado escribir no sólo su mejor libro hasta la fecha, sino que puedo afirmar que se trata de una de las novelas más completas y geniales de los últimos tiempos.
Su último libro traducido al español, si no contamos el publicado en 2008 Sauce Ciego, Mujer Dormida (Blind Willow, Sleeping Woman) al tratarse de una colección de relatos que abarca el período entre 1981 y 2005, es el magnífico colofón a la carrera literaria de este escritor japonés amante del jazz. Después de grandes títulos, como Sputnik, Mi Amor o Tokio Blues (A Norwegian Wood), este último el libro que le proporcionó fama y reconocimiento internacional, o de algunos “fracasos” como Al Sur De La Frontera, Al Oeste Del Sol o la reciente Sauce Ciego, Mujer Dormida, Murakami ha logrado con Kafka En La Orilla (海辺のカフカ, Umibe no Kafuka) la madurez necesaria para confeccionar una novela que más que probablemente debe ser considerada como uno de los títulos más significativos de comienzos de siglo.
Su prosa compleja y surrealista, preciosista y ambiciosa logra una resultado perfecto en esta novela. El viaje iniciático de Kafka Tamura y el clásico complejo de Edipo es la excusa que Murakami utiliza como punto de referencia para adentrarnos en su mundo mágico y a veces surrealista. Un laberinto de personajes e historias que invariablemente buscan la recompensa de la salida. Un adolescente de quince años que se escapa del hogar familiar para evitar un destino escrito de antemano, un alter ego que no es sino el recurso que utiliza Murakami para dar entrada a la figura del narrador dentro de la historia, como un Pepito Grillo que evita imprecisiones y pérdidas del lector por la trama de la historia, un anciano que habla con los gatos, un camionero que se presenta bajo el disfraz de lazarillo, una bibliotecaria con una misteriosa historia de amor, un personaje andrógino que busca su destino, Johnnie Walker (conocido por salir en la etiqueta del whisky al que da nombre) y el Coronel Sanders (el personaje de las cajas de pollo del KFC).
Estos son algunos de los personajes que aderezados con una historia de realización y descubrimiento personal dan lugar a esta magnífica novela, llena de situaciones surrealistas (se hace muy difícil no recordar a Cortázar en alguna de ellas) que gracias a la mano de Murakami, son tan cotidianas como el mismo despertar.
Es muy complicado mostrar objetividad hacia un escritor que ha logrado impresionarme tantas veces, pero no puedo escribir este comentario sin recomendar encarecidamente la lectura de este libro. Sobre todo para todos aquellos seguidores de la literatura latinoamericana que ven en el realismo mágico la corriente literaria por excelencia. Murakami es un ejemplo claro de la evolución actual del boom hispanoamericano. No obstante, a mi modo de ver, se hace necesaria una lectura previa de este escritor para poder saborear hasta la última gota de Kafka En La Orilla ya que puede parecer complicada en un primer momento si no existe un entrenamiento previo, y sobre todo porque el universo Murakami juega con la realidad y la fantasía de tal modo que se necesita un aprendizaje para que no sorprenda demasiado. Yo abordaría previamente Sputnik, Mi Amor y Tokio Blues, en este orden. Aunque quien soy yo para adoctrinar mentes tan inquietas.

domingo, 14 de septiembre de 2008

"Arthur & George" de Julian Barnes

El último título de Julian Barnes nos transporta a la Inglaterra de principios de siglo XX y al trascendental encuentro de sus dos protagonistas, Arthur Conan Doyle y George Edalji. Un libro con una elegante narrativa de uno de los autores británicos más aclamados de los últimos tiempos, que narra los acontecimientos reales que tuvieron lugar a comienzos del siglo pasado y que dieron lugar a que se instaurara la segunda instancia dentro del ordenamiento jurídico británico.
Dicho esto podemos pensar que nos encontramos ante uno entre tantos de los best seller a los que nos tienen acostumbrados abogados reconvertidos a escritores de la talla de John Grisham, si no fuera porque se relatan acontecimientos reales y documentados con una calidad indiscutible y porque en los mismos se vio envuelto el mayor escritor de novelas detectivescas de la literatura universal.
Un suceso misterioso que acontece en el pueblo de Wyrley, en el condado de Staffordshide (en las profundidades de Inglaterra) llama la atención de Sir Arthur Conan Doyle. Acontecimientos extraños, que comienzan con la aparición de animales misteriosamente mutilados y que genera una serie acusaciones infundadas, el envío de anónimos, la actuación parcial de la policia y finaliza con una seri de errores judiciales. Con todos estos ingredientes, no es de extrañar que el padre de Sherlock Holmes comenzara una cruzada en pos de la verdad y la justicia, hasta el punto de involucrar con ello no sólo a los altos estratos de la judicatura, sino que, gracias a sus presiones y valiéndose de su notoriedad y perseverancia, alcanza el mismísimo Ministerio del Interior.
Bajo este pretexto, Julian Barnes nos presenta una novela donde desborda su capacidad de investigación y documentación del hecho relatado y donde juega con las historias y las personalidades antagónicas de sus dos protagonistas. Mientras que Conan Doyle es sobradamente conocido por sus excentricidades (el lector descubrirá sus inclinaciones hacia los fenómenos paranormales y el espiritismo), su popularidad, su renombre y su alta alcurnia, Edalji es un hombre de pueblo, introvertido, familiar, un modesto abogado con una vida sencilla en la que únicamente destaca, hasta ese momento, un manual escrito sobre legislación ferroviaria de escasa repercusión. La estructura del libro nos lleva constantemente hacia cada uno de los personajes hasta que estos, ya avanzada la trama, llegan a encontrarse y comienza el devenir de esta relación y el desenlace del misterio.Una novela más que interesante y de una grandísima calidad literaria, no en vano fue preseleccionada para el Booker Price de 2005 (nada más que decir al respecto ante mi debilidad hacia este premio). Además de esto Barnes es el autor de obras como Flaubert’s Parrot (El Loro de Flaubert) o A History of the World in 10½ Chapters (Una Historia del Mundo en 10 Capítulos y Medio) y que ha sido galardonado con los premiso E.M. Foster de la Academia Amnericana de las Artes y la Letras, el William Shakespeare de la Fundación F y S de Hamburgo, el Prix Femina y condecorado como Caballero de la Orden de las Artes y las Letras por el Ministerio de Cultura francés.

domingo, 7 de septiembre de 2008

"Firmin" de Sam Savage

Hace algún tiempo leí un artículo en el periódico en el que destacaban Firmin como uno de los fenómenos literarios del pasado año. En ese mismo artículo la directora editorial de Seix Barral (la editora en español de Firmin) explicaba que descubrió el texto casi por casualidad. Se encontraba en casa de un agente literario cuando vio sobre su escritorio una novela publicada únicamente en una pequeña editorial de Minneapolis y le sorprendió su carátula, en esta aparecía el dibujo de una espantosa rata leyendo un libro. Esta “avispada” editora compró los derechos del libro argumentando que una portada tan fea debía contener algo interesante en su interior (nada que ver con su publicación anterior, en fin). Afortunadamente, gracias a esa decisión (la primera vez que esta MacEditorial compra los derechos de un título no traducido al español) ha llegado hasta nosotros la primera novela del norteamericano Sam Savage.
Sam Savage se nos presenta no sólo en su faceta académica de profesor y titulado por la Universidad de Yale, también se encargan de destacar el hecho de que haya trabajado como mecánico de bicicletas, carpintero, pesador y tipógrafo. Todas estas ocupaciones hacen de Sam Savage un escritor atípico (no hay más que ver su foto en la solapa del libro) que ha logrado escribir un exitoso libro cuya calidad ha corrido como la pólvora entre lectores y escritores de todo el mundo dando una dimensión mundial a este fenómeno.
Firmin es un libro apasionante para aquellos apasionados por la lectura. Su comienzo es espectacular, ya que en el primer capitulo el narrador se enfrenta al miedo del folio en blanco y al problema de la primera frase, repasando los comienzos más destacados de la literatura universal que cualquiera de nosotros podría recitar de memoria.
El texto nos cuenta la historia de Firmin, una rata que nace, junto con sus doce hermanos, en el sótano de una librería de viejo. Esta metáfora tan manida de la rata de biblioteca es en Firmin el sorprendente argumento que nos lleva a conocer la vida de su protagonista. Su nacimiento, su apetito por los libros (literalmente hablando), su pasión por estos una vez aprende a leer, su relación con el dueño de la librería. Un animal que va adoptando características humanas hasta que consigue relacionarse con ellos como un igual.Un libro que rinde su particular homenaje a las obras de escritores como Nabokov, Cervantes, Joyce, Miller y Dickens, entre otros. Lleno de humor y de sensibilidad. De ternura y melancolía. Uno de esos libros especiales que gusta recomendar porque no defrauda a nadie. Como ya he comentado es un libro para lectores, ya que muchos verán sus gustos literarios reflejados en los de esta pequeña rata.

jueves, 28 de agosto de 2008

“El Consuelo” de Anna Gavalda

“(…) está la primera partida, la segunda, luego la decisiva, después la revancha y, por último, la del consuelo. Es una partida en la que ya nadie se juega nada… Una partida sin competición, sin perdedores… Por el placer de jugar y ya está… (…)”.
Con este único propósito debe abordarse El Consuelo (La Consolante) sin pretensiones ni anhelos, por el placer de leer, y ya está. Un libro en el que el lector debe dejarse llevar y como mero observador, contemplar y disfrutar de la vida que en el mismo se cuenta, sintiéndose partícipe en todo momento de las emociones que poco a poco van aflorando en la persona de Charles Balanda y sobre todo de la resurrección personal de este. Nos convertimos en ese lector omnisciente que todo lo ve, si bien para disfrutar completamente, hemos de dejarnos llevar y mimetizarnos con el personaje de la historia.
En contadas ocasiones el título de una obra es tan acertado como en esta novela de la autora francesa Anna Gavalda. Se me hace difícil escribir un comentario sobre un libro como este, cuando lejos de la técnica literaria y la trama de la obra, lo más destacado de la misma es la conmoción que te sobrecoge cuando finalizas la lectura.
La historia que nos presenta esta joven autora parisina es más bien simple, sin que podamos destacar un trenzado complejo de situaciones ni un final impactante. Nos narra la vida de Charles Balanda, un arquitecto de 46 años, con una vida profesional exitosa y ajetreada y con una familia del todo convencional, mujer e hija adolescente. Toda su vida da un vuelco cuando recibe la noticia de la muerte de Anouk, madre de su mejor amigo de la infancia y su amor durante su época de adolescente. Es en ese momento cuando una cascada de recuerdos y sentimientos que creía olvidados cae sobre él y dan lugar a que este comience a replantearse tanto su vida actual, como el futuro.
La prosa de Anna Gavalda, es sencilla y atrayente. Utiliza generalmente frases cortas y punzantes (lo que le ha granjeado no pocas críticas en Francia) y que hace que su estilo sea decididamente particular. Precisamente gracias a ese estilo directo consigue mantenernos atentos sin utilizar ripios ni frases grandilocuentes. Quizá a la novela le falte algo de ritmo en su primera parte, aunque reconozco que es muy posible que la propia autora quiera que los sucesos que ocurren a lo largo del texto nos vayan proporcionando el ritmo adecuado a cada momento. La segunda mitad, que coincide con la aparición del personaje que completa la historia, es mucho más interesante y envolvente, con una rapidez extrema llegando a un punto en el que se hace bastante complicado dejar de leer.Anna Gavalda es la autora francesa que más vende hoy día siendo, junto a Amelie Nothomb, el claro exponente de la literatura francesa actual. Parisina y periodista, colabora con la revista Elle. Gavalda ha sido premiada en Francia con el France Inter con su primer libro La Carta de Amor Más Hermosa (La Plus Belle Lettre d'amour) aunque el reconocimiento internacional lo obtuvo años más tarde con su libro Quisiera Que Alguien Me Esperara En Algún Lugar (Je Voudrais Que Quelqu'un M'attende Quelque Part) que le reportó además el Grand Prix RTL-Lire en el año 2000. No obstante, quizá su obra más conocida hasta el momento sea Juntos, Nada Más (Ensamble, C’est Tout) sobre todo gracias a su adaptación cinematográfica que de la misma realizó Claude Berri y que protagoniza Audrey Tautou.

miércoles, 23 de julio de 2008

"Maus" de Art Spiegelman

Novela gráfica. Género que en la actualidad goza de una gran aceptación entre el mundo literario, gracias a la calidad, no ya de las ilustraciones, sino de los textos e historias que llegan hoy día a las librerías, tiene uno de sus grandes referentes en esta obra del dibujante sueco Art Spiegelman.
Maus ha sido considerada por muchos como la mejor novela gráfica de la historia llegando a ser el primer cómic en ganar allá por el año 1992 el prestigioso Premio Pulitzer y conseguir una exposición de sus viñetas en el MOMA de Nueva York.
Spiegelman (diseñador, además de dibujante) ha logrado crear una obra distinta de una temática más que manida, el holocausto judío. Numerosos libros se han escrito sobre el nazismo y el sufrimiento del pueblo judío durante la II Guerra Mundial, pero para ser justos, ninguno de ellos ha sido abordado desde la visión de Maus. Sólo hay que ver el dibujo de la portada (tras un par de ratones asustadizos aparece la figura de un Hitler gatuno superpuesto sobre una esvástica) para adivinar que nos encontramos con un libro diferente. Desde la edición actual española (Ediciones Random House Mondadori), muy cuidada, una cubierta y sobrecubierta con grandes detalles y una alta calidad del papel, hasta los textos, respetando los errores gramaticales y en los tiempos verbales del personaje principal, pasando obviamente por unas ilustraciones tan eficaces que olvidas con facilidad que se trate de dibujos de trazos más que simples.
Maus nos cuenta la historia biográfica de Vladek Spiegelman (padre del autor), un judío polaco y cómo su vida y la de su familia se ve truncada con la llegada de Hitler al poder y la invasión de Polonia por el ejército nazi, contada a través de los recuerdos que Art recoge en las visitas que le hace a su padre. Guerra, hambre, injusticias, genocidio, odio… nazismo. Todos estos temas no empañan una segunda línea argumental tan interesante o más que los anteriores, la complicada relación de Art con Vladek y cómo el sufrimiento al que se ve sometido este último durante el holocausto judío hacen de él un viejo avaro y enfermo que se va desvaneciendo poco a poco a lo largo de la novela. En palabras de Art “coincide con la caricatura racista del viejo judío avaro" (pág. 133).
Maus es la conmovedora historia de un superviviente. Una lectura obligada. Una obra más que destacada de la literatura contemporánea, interesante tanto por el texto en sí como por el formato que lo embellece. Sin fisuras y con una viñeta final de una belleza y un simbolismo extraordinario. Una NOVELA GRÁFICA.
Por cierto, todas las nacionalidades de los personajes están representadas como animales. Los judíos son ratones y los nazis gatos (los franceses ranas, los polacos cerdos, los suecos ciervos y los estadounidenses perros) ¿una metáfora más apropiada que ésta?

miércoles, 16 de julio de 2008

"La Senda del Perdedor" de Charles Bukowski. Combate cuerpo a cuerpo.

Reconozco que soy amante de los deportes de contacto, aunque hoy día no sea demasiado sofisticado sentir cierto placer por observar a dos hombres golpearse hasta la extenuación sobre la lona de un ring. Un sentimiento parecido me embarga cuando leo cierta literatura, la lectura se transforma, indudablemente, en un combate cuerpo a cuerpo entre el que escribe y mi persona. En esta situación me he encontrado con la novela de Bukowski, aunque aviso que este es sin duda el peor contrincante con el que te puedas encontrar, ya que no tienes opción alguna frente a un adversario de esta índole. Sus golpes son directos y precisos, no te permite descanso alguno para coger aire y boqueas a duras penas buscando un poco de oxígeno, mientras sus diálogos y situaciones te golpean constantemente sin dejarte tiempo alguno para poder recuperarte.
Charles Bukowski, alemán de nacimiento aunque afincado en Estados Unidos, es considerado el último de los escritores malditos de la literatura norteamericana. Su prosa ha sido calificada como marginal, obscena, vulgar y maldita, aunque llena de hallazgos lacónicos. No obstante, su genialidad lo ha llevado a ser reconocido como el creador de buena parte de la novela más directa y cruda que jamás se haya escrito, haciendo de Bukowski un escritor de culto. La Senda del Perdedor es el recorrido por la infancia y adolescencia de Henry Chinaski (alterego que utiliza Bukowski para contar sus decepciones). Una novela autobiográfica que recorre, como digo, los primeros años de un Chinaski/Bukowski rodeado por el paro y la desesperación que azota Norteamérica durante los años de la Gran Depresión. Inmerso en un ambiente pobre y miserable, en un suburbio de Los Ángeles, con un padre autoritario y violento, una madre sumisa y acobardada, unos familiares alcohólicos y pendencieros, el hecho de que Henry sufra unas horribles erupciones en la piel, tan dramáticas que llegarán a dejar marcas permanentes en su rostro, no lo ayudarán a introducirse en una sociedad en la que de todos modos no encuentra lugar. Tampoco se relacionará con compañeros o habitantes del vecindario (que no amigos, Chinaski desprecia todo contacto humano) salvo para humillarlos o castigarlos esgrimiendo su elocuencia e ironía.
Todo ello unido a las continuas palizas que recibe, primero involuntarias provenientes de su propio padre, y luego buscadas y consentidas por parte de cualquier matón o compañero escolar que se atreviera a contrariarlo, hacen que Henry/Charles encuentre consuelo en la que será, junto al sexo, una de las grandes obsesiones de Bukowski en su obra literaria, el alcohol. A lo largo de su vida despreció los ambientes literarios argumentando que prefería cualquier bar antes que una reunión de escritores.
Henry Chinaski o Charles Bukowski, Charles Bukowski o Herny Chinaski es ante todo un superviviente, un lector empedernido y uno de los escritores más prolíficos de la literatura contemporánea. Poeta y novelista, escritor “underground”, la obra de “Hank” Bukowski es tan escandalosa como imprescindible.

domingo, 13 de julio de 2008

"Midnight's Children" gana el Best of the Booker

Tras su aparición en 1980 Midnight's Children (Hijos de la Medianoche) no ha dejado de atesorar premios y reconocimientos que han hecho de esta obra del autor británico Salman Rushdie, una de las novelas contemporáneas más destacadas. En 1981 Midnight's Children fue galardonada con el Premio Booker que reconoce la mejor obra de ficción en lengua inglesa de autores pertenecientes a los países que integran la Commonwealth e Irlanda. Este premio está considerado como el más prestigioso de los que se otorgan en el Reino Unido, ya que tras su primer fallo en 1969, fue el primero de las islas que otorgó, no sólo reconocimiento internacional, sino una dotación económica a su ganador. Posteriormente en 1993 y con motivo de su 25º aniversario la fundación del Premio Booker creó el Booker of Booker Prize, que reconocía la mejor obra de las ganadoras del Premio Booker en sus veinticinco ediciones, correspondiendo igualmente este honor a la obra de Rushdie premiada en 1981. El pasado viernes y coincidiendo con la 40ª edición de los Premios Booker, el jurado del mismo quiso reconocer la mejor obra ganadora de este premio a lo largo de su historia concediendo el denominado Best of the Booker, recayendo igualmente este honor a la obra del escritor nacido en Mumbay (India).
Ni que decir tiene que Midnight's Children es una obra maestra, aclamada por público y crítica, siendo considerada una de las obras de ficción en inglés más conocidas e importantes del siglo XX y un claro exponente del realismo mágico, considerada por muchos como la versión india de la magnífica Cien Años de Soledad de Gabriel García Márquez.
La novela transcurre en la India en los años posteriores a la medianoche del 15 de agosto de 1947, fecha en la que India deja de ser colonia británica, alcanzando su independencia y escindiéndose de Pakistán. En esta medianoche nace una generación de niños con poderes sobrenaturales, entre los que destaca su protagonista Saleem (telépata y poseedor de un extraordinario olfato), quien no podrá obtener provecho alguno de los dones que le han sido concedidos. Con esa combinación de magia, humor e ironía que caracteriza la producción de Rushdie, este nos presenta su visión personal de los problemas tanto sociales como religiosos a los que se enfrentará el recién descolonizado estado indio, tras el abandono, tanto económico como político, que sufre por parte del Imperio Británico. A través de una evidente metáfora entre los dos principales protagonistas de la trama (dos hijos intercambiados al nacer) con los dos estados nacientes esa medianoche del 15 de agosto de 1947 (India y Pakistán), el escritor nos lleva de la mano a una reflexión sobre los problemas que caracterizaron toda una época y una generación.
Alejado en estilo de otros escritores indios como el nobel V.S. Naipaul o Vikram Seth, la obra de Rusdie se encuentra más cercana a la superventas Arundhati Roy en cuanto al tratamiento fantástico y mágico de sus temas, pese a que se encuentra muy por encima de esta en lo relativo a calidad y profundidad de sus textos. Su obra es de obligada lectura para los amantes del realismo mágico, entre los que me encuentro, y para aquellos que pretendan acercarse de un modo más que interesante a la cultura india, ya que en Rushdie podemos encontrar novelas caracterizadas por su gran contenido social y político, aderezados con grandes toques de humor e ironía, sin olvidar ese ingrediente de fantasía y magia que los convierte en grandes obras de nuestra época. Destacaría entre su producción Shame (Vergüenza), su libro de relatos East, West (Oriente, Occidente) o para una primera incursión en el mundo rushdiediano The Ground Beneath Her Feet (El suelo bajo sus pies). En fin, mi más sincera enhorabuena a Salman Rusdie y su genial Midnight’s Children.